Por Taher Kameli
Según la ley de inmigración de los Estados Unidos, las personas con doble nacionalidad no pueden solicitar asilo a menos de que sean perseguidos por los países de los que son ciudadanos; los extranjeros que son ciudadanos de dos países se denominan ciudadanos con doble nacionalidad.
El asilo es el que se otorga a las personas que vienen o viven en los Estados Unidos. Para la solicitud, la persona debe estar presente en el puerto de entrada (aeropuerto, puerto marítimo o puerta fronteriza) o presentar el Formulario I-589 “Solicitud de asilo y denegación de transferencia”, en el centro de servicio respectivo dentro de un año de su llegada al territorio norteamericano. Puede presentar su solicitud independientemente de su estatus migratorio, entiéndase si está de forma legal o ilegal en el país. Si su caso es aprobado, se le dará protección y el derecho a permanecer dentro del territorio hasta que reciba una decisión sobre su caso.
Cada año, miles de personas vienen a los Estados Unidos en busca de ayuda, huyendo de sus países natales.
Las dos formas de obtener asilo son el proceso afirmativo y el proceso defensivo. En la mayoría de los casos, se solicita asilo porque la persona cree estar en peligro mortal si regresa a su país de origen. Las razones más comunes son el temor de ser asesinadas o perseguidas por su gobierno, el rechazo a su raza, estatus social, creencias personales, políticas o religiosas.
Un dato importante es que, si una persona es puesta en proceso de deportación, puede solicitar asilo y un juez de inmigración decidira sobre su caso.
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Este blog está disponible sólo con fines educativos para proporcionar una idea general sobre si cómo funciona el asilo en los Estados Unidos. La información publicada en este sitio no debe interpretarse como asesoramiento legal. El uso de este sitio no crea una relación de abogado-cliente.